Concurso de pinchos de Oviedo: estos son los diez pretendientes al trono del mejor bocado del municipio

El trono sobre el que se sentará el creador del bocado más sabroso del municipio en 2024 ya tiene pretendientes. De la treintena de bares participantes, diez han pasado el corte y llegarán a la final de la decimocuarta edición del Campeonato de Pinchos y Tapas de Oviedo. Los "elegidos para la gloria" son nueve establecimientos de la capital de Asturias y uno de la zona rural, de Latores. La gala donde se decidirá el ganador se celebrará el próximo martes, día 23, en la Escuela de Hostelería y Turismo que la patronal del gremio, Otea, tiene en Olloniego. Un jurado experto será quien tenga la decisión última sobre el ganador de los finalistas a las 10.30. Después de realizar una cata de las obras culinarias, a las 12.30 horas será la entrega de premios. Aún hay tiempo para probar cualquier pincho, ya que el evento gastronómico, del que LA NUEVA ESPAÑA es patrocinador, termina mañana, domingo.

Las propuestas de Oviedo que han alcanzado el momento cumbre del campeonato son nueve. La puerta de Cimadevilla, que ganó la edición anterior, sigue la estela de la ciudad con su pincho, que lleva por título "Oviedo, Capital Gastronómica". Han optado por elementos que identifican a Oviedo y Asturias. Consta de una vieira, por el origen del Camino; un rebozado de cerdo, por la montaña; una mayonesa de oricio que evoca a la mar y un toque dulce con crema de carbayón, el conocido dulce típico de Oviedo.

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El Asador Marinero La Costera lo ha logrado gracias a su "Bocadillo de calamares", un acercamiento "diferente" a la receta. Parten de unas conchas de alioli frito, que hacen las veces de pan, rellenas de un ceviche de calamares con helado de pan de escanda.

La propuesta de Bocamina Gastro se llama "Meloso en boda". Se trata de una "tosta de taco ibérico deshuesado". Y es literal, porque la carne es la base de la "tosta", sobre la que reposa una corteza coronada con brotes de soja.

Casa Amparo optó por un plato que evoca a los "Sabores de Oviedo". Un pan bao de origen asiático se mezcla con la carne gobernada desmechada, típica de la Ascensión. Una mezcla de mayonesa y yogur griego con diversas especias, vegetales y sardina ahumada condimenta el plato.

El reciente ganador del primer premio de los Bocados del Cofrade se ha colado también entre los finalistas gracias a "La raza viajera". Lo logra fusionando Italia, Asia y el trópico con una base de focaccia con costra de ajo y perejil, tartar de presa de angus y espuma de piña picante.

El "Triángulo de dorada" es un dim sum –buñuelo japonés– relleno del pescado que da nombre al pincho, aceite de trufa y una cama de espuma de pimiento del piquillo. Llega desde Go Sushi.

Doña Concha hace hincapié en la importancia del producto autóctono. Y lo hacen con su "Costilla asturcelta abuñuelada", un buñuelo cuya materia prima es el gochu de la citada variedad del que, en el restaurante, gustan "hasta los andares".

El Regreso Gastrobar con su "Capricho de bacalao y erizo de mar", presenta una croqueta cremosa con ingredientes costeros. Bacalao, erizo de mar y algas marinas conjugan el relleno.

Floridita conjuga dos pitos asturianos: el pollo y el queso afuega’l pitu en "El ñeru del pitu". La tapa, con brandy, crema de queso y nata, entre otros, se sirve en un cofre de madera.

Por último, la única propuesta del municipio que llega desde fuera de Oviedo es la "Merluza Casa Chema", del restaurante homónimo de Latores. El pescado lleva un pil pil de capuchina sobre mantequilla de marisco con sisho y salicornia, presentado sobre un cristal "para recordar la mar".